Durante la pandemia, muchas personas trabajaron desde casa durante más de dos años, lo que transformó la manera de operar y demostró que un esquema de trabajo remoto es viable. Sin embargo, en la «nueva normalidad», algunas empresas han regresado al trabajo presencial, lo que ha llevado a muchos empleados a abandonar sus puestos en busca de opciones laborales que ofrezcan mayor flexibilidad, como modelos híbridos.
La propuesta de valor que una empresa puede ofrecer a sus colaboradores se basa en la experiencia laboral que brinda. Esta incluye una cultura organizacional que se preocupa por el bienestar del individuo, oportunidades de crecimiento y desarrollo, así como un entorno que fomenta la participación y la toma de decisiones.
Autores como Mortensen y Edmonson propusieron en 2023 un sistema que agrega valor al colaborador, integrando cuatro factores interrelacionados:
- Oferta material: Incluye la compensación, la ubicación y las características físicas de las oficinas, así como el equipo y la tecnología disponibles para los colaboradores. También contempla horarios flexibles, prestaciones y beneficios materiales.
- Oportunidades de desarrollo y crecimiento: Estas estrategias permiten que los empleados aumenten su valor en el mercado laboral y mejoren su empleabilidad. Entre ellas se encuentran la asignación de nuevas
responsabilidades, la rotación de puestos, la capacitación y los procesos de promoción dentro de la organización. - Conexiones y comunidad: Este factor incluye el reconocimiento y la sensación de aprecio que sienten los empleados al formar parte del equipo, así como los beneficios de la interacción social y las relaciones personales.
Se busca que los colaboradores se sientan parte de un ambiente laboral donde la cultura les permita expresarse, participar e interactuar, promoviendo así un sentido de pertenencia hacia la organización y el equipo. - Propósito y sentido: Se refiere a los esfuerzos de la empresa para alinear los valores del colaborador con la cultura organizacional. Esto abarca las iniciativas de responsabilidad social corporativa que generan valor e impacto social. También implica la coherencia entre las acciones de los líderes y la misión, visión y valores que definen la cultura de la organización.
Si los líderes promueven estos cuatro elementos propuestos por Mortensen y Edmonson, la experiencia de los colaboradores en la organización fortalecerá su sentido de pertenencia, generará compromiso y fomentará que recomienden a la empresa como un buen lugar para trabajar.
Para que las empresas logren una propuesta de valor que fomente el compromiso de sus colaboradores, primero deberán analizar su oferta en relación con los cuatro factores mencionados y alinearla con las necesidades y expectativas de su talento. Al conocer tanto la oferta como la demanda, será esencial identificar los atributos que, en ese momento, generen valor para los colaboradores.
En segundo lugar, los líderes deberán implementar acciones tanto en términos de oferta monetaria como no monetaria para mejorar y alinear la propuesta con las expectativas de su equipo.
Los autores son profesores del área de Dirección de Personal de IPADE Business
School (@IPADE).
Fuente: El economista/capitalhumano