Un Value Stream Mapping (VSM) o Mapa de Flujo de Valor es una herramienta visual utilizada en la metodología Lean para representar, analizar y mejorar los flujos de materiales e información implicados en un proceso de producción, desde que un producto o servicio se idea hasta que se entrega al cliente.
El Mapa de Flujo de Valor comprende una serie de procesos para conseguir entregar a los usuarios un producto o servicio que necesitan o desean. Un mapa de flujo de valor es una herramienta que nos ayuda a comprender mejor todos estos pasos, ver cuáles añaden valor y cuáles no, desde el punto de vista del cliente.
El valor es todo aquello por lo que el cliente está dispuesto a pagar. Mientras que las principales situaciones que no crean valor, los tipos de desperdicios en Lean incluyen la sobreproducción, la espera, el exceso de stock o la corrección de errores, entre otras.
Por lo que la finalidad del VSM es, generar el mayor valor para el cliente de la forma más eficiente. Y lo hace optimizando los procesos de fabricación, eliminando o al menos reduciendo aquellos subprocesos o tareas que no son necesarios o entorpecen el proceso de producción.
El Mapa de Flujo de Valor implica cuatro pasos básicos:
- Generar un mapa del proceso actual.
- Encontrar y eliminar los desperdicios.
- Generar un mapa del proceso mejorado que se utilizará en el futuro.
- Implementar el proceso que se utilizará en el futuro.
El margen de mejora en algunas áreas del Mapa de Flujo de Valor es:
- Flujo del proceso.
- Plazos de ejecución y procesamiento.
- Confiabilidad del equipamiento.
- Materias primas/inventario.
Un Mapa de Flujo de Valor es una forma de analizar el estado actual del proceso productivo y desarrollar un estado futuro más eficiente. Este proceso te ayuda a visualizar cómo trabajas, lo que te permite descubrir qué áreas necesitan mejoras.
