El employer branding o marca empleadora, tiene que ver principalmente con la reputación de la compañía, es decir, con la imagen que proyectas hacia tus propios empleados y a los posibles candidatos, lo cual se traduce en una mayor fidelidad de los primeros y en el interés de los segundos por formar parte de tu equipo de trabajo. Por tanto, el objetivo principal es construir un posicionamiento que permita atraer y retener a los mejores perfiles profesionales.
Esto lo puedes lograr al implementar planes de recompensas, planes de crecimiento, cuidar las políticas de bienestar de la organización, mantener a la plantilla motivada, retribuir adecuadamente al personal, cuidar el clima laboral y la adecuación de los puestos de trabajo, y similares. En definitiva, por apostar porque los trabajadores se sientan cómodos.
Entre las principales ventajas del employer branding podemos enumerar:
- Aumento en el número de candidatos interesados en unirse a la plantilla.
- Mejora en la fidelización de los empleados.
- Minimizando el absentismo y la rotación de personal.
- Reducción de un 46 % en los costes de contratación y de un 10 % en los gastos laborales (según datos de Randstad).
- Refuerzo del sentimiento de pertenencia del capital humano y con ello de su motivación e implicación.
- Diferenciación de la competencia a partir de una propuesta de valor añadido.
- Impulso a tu imagen de marca en la sociedad.
¿Cómo reforzar el employer branding de tu empresa?
Fomentando un buen ambiente laboral
Es clave tanto para retener a los colaboradores, que a su vez pueden ejercer como embajadores de la empresa, como para atraer a candidatos.
Ofrecemos formación continua
Los colaboradores y los candidatos buscan crecer profesionalmente y superarse, para ello es fundamental darles la posibilidad de aprender constantemente poniendo a su disposición herramientas formación y atendiendo a sus intereses.
Mantenemos una comunicación fluida
Las empresas se deben comunicar a todos los niveles y en todas direcciones —horizontal, vertical y transversalment —, además de dar a los empleados la oportunidad de aportar su punto de vista, de manera que se sientan escuchados.
Desarrollar planes de crecimiento
Orientar a los colaboradores a encontrar su propósito laboral y permitirles optar a posiciones son estrategias muy importantes a la hora de retener el talento.